martes, 14 de mayo de 2019

Las aventuras del gordo peterete III

Se está muriendo gente importante para gente importante para mí y que les soy ajeno. De alguna manera. Me sorprendo que estén pasando por rachas de caídas de guerra como nunca. Un tangazo, diría la profesora.
Sé que en esas situaciones y cuando te interiorizás un poco sobre la historia de esas personas que estaban alrededor de los important guy ves que hay otra vida y no te vas a cagar de risa de su desgracia. Como sentí que hicieron otros por la espalda. Y la empatía es parte de su vocabulario. Y se esconden. Lo hago por un respeto que les tengo, aunque les suene tibio como comentario. "Yo respeto mucho las cosas que hace Diego". Más cuando el tibio es uno. Y no se vea porque está muy oscuro.
Cuando se te pase bilis negra, no voy a ser Corgan. Si pudiese un texto sacar una mueca inconexa.
En algún momento escribí sobre los chistes de velorios. Cuando uno empieza a tener conciencia de la finitud. Y de las cosas que sabés que no vas a hacer más. Sin que otros se enteren. Y que quizá estás en la cresta de la ola y al otro día todo se fue al diablo. Como una bipolaridad incorporada a lo cotidiano.
Y estoy escribiendo con el sabor de una galleta de arroz sin sal ni azúcares para el desayuno.
Tendré que seguir buceando mientras dure esta  pseudo-amnistía o mi amnesia paulatina.

(Marito abraza a su hermano)

Traces by Rafael Anton Irisarri

PD: "Un reemplazo de mí no podrá hermosearte más..."