martes, 27 de agosto de 2013

Flota

Trato de concentrarme.
Algo siento a la hora de cambiar,
con todas las desinformaciones
todo el tiempo
de dejarlo todo hoy
para recomenzar
el año que viene
y los que saldrán,
estudios nuevos
o los mismos
con mayor optimismo,
deseo puesto afuera
y relajar la soberbia
que te impulsa las arterias
del cuello para tener razón,
con cigarrillo en mano
y un vaso de cerveza
haciendo juego macabro.
Pateo los miedos
para adelante, siempre.
Ya van varios fallidos
donde perdimos la satisfacción,
después del te veo a la salida
y cómo te marca la espalda
el sudor con nicotina.

Más allá,
fue ponerte
en el último grito
de la moda,
un quincho,
el botox,
la solarium,
los calzones a cuadritos
embebido en nafta
rompecorazones,
las pantaletas apretadas
que te asfixia tu grasa.
y salís
para verte
viejo
lascivo

A cada día que dejás
pasarte en la ilusión
de la comunicación
con el celoso
sobre la mesa
y la tele antipática
te convertís
en el huevo podrido,
clásico de heladera del distraído.

sábado, 24 de agosto de 2013

SoS, Eh o ¿Cómo escapo?

los cosos estos del 
pasadoaunque
tenga distancia
ficcionada sin final
con esa perfección
del 
sólo esta vez
él, tu hieres impune aquí,
se transgrede,
te trastorna,
da culpa iniciarte
distinto,
aparte de la casualidades
los ah,
cerca
miento 
escalera
subidón
contra la espada desconocida
y llegar con borbotones,
hervores en la cara
ante
preguntas concretas
del chat 
con palo y a la bolsa,
dejado el manual,
destilo
pasado
comen sado
para dejarlo distinto...
y ser un instinto
presente

sábado, 17 de agosto de 2013

Marcos Zucker

me acuesto con
lo que pudimos
con lo que nos perdimos
los deseos
los anhelos,
fracasos cercanos
entre las caídas de lágrimas
siempre nos encontramos
en cruzar
los cruces de tres avenidas
sin semáforos del barrio
cercano,
y aprendernos los tonos,
qué ´podemos hacer
con la sonrisa
de una galletita
en la boca

viernes, 16 de agosto de 2013

Gesell

Él,
se hizo a un costado
se puso del otro lado
no sabía qué club
el clan
la onda
si hablar
o callar
acercarse fue mucho,
si fue por
la revista
o
León
lo que estuvo
al lad...
o
y se fue
entre unas corridas
y nos vemos,
cada vez
entre las calles
con zapatillas
sobre los cables
O
(nadie nos robará el momento,
donde dos amigos
mientras los chicos dormían
al lado de un amanecer
con resaca,
&
cantábamos contra el ruido del mar
con los cuadernos con espirales
que arrastraban
las hojas de tu viento)

jueves, 15 de agosto de 2013

con los analgésicos
para olvidar
elmiedoterrible
en general
no queremos escuchar
ese silbido
esas alarmas
las sirenas
esos análisis
que corren avenidas
con el crujir de las escaleras,
los dejás todo a un costado
y podés seguir,
rumeás
la prueba terror
con inocentes
lo tratás de llevar ese gramo
de arena incómodo,
a otros no,
es cierto
o a las alturas
de las circunstancias
para un después
tapar posturas,
lavarme los platos
y me apelmazo
en un quema neuronas
de mi adolescente habitación
donde no nos bancamos
lo que me pasa
que parte de una soledad
de costumbre
como despedida
del día

domingo, 11 de agosto de 2013

Colores Santos

"Yo seguí
a la estrella
mas voraz,
nunca llegué 
tan lejos"

"Comencemos
a subir
Nunca tan alto
caí"

"Fluir sin un fin
más que fluir"

"Nada es Casualidad
Mereces Lo Que Sueñas"

"Con calles con luz
de patio


viernes, 9 de agosto de 2013

Poesía Rock

Estuve solo en nuestro amor
Estuve solo:
Como comido por la sal del sol,
Igual que el perro de Iggy Pop.

Y no estoy mas solo
ahora estando solo.

Sentía todo y no sentía nada,
La mente, el corazón , el alma.
Todas mentiras de poesía de rock.

Estuve solo en nuestro amor
Estuve solo:
Cegado por la cal de algún milagro,
Fui el extranjero de la banda Doors

Y no estoy mas solo
ahora estando solo.

Sentía todo y no sentía nada,
La mente, el corazón , el alma.
Todas mentiras de poesía de rock.

Rock
Rock
Rock
Rock
Rock Mi amor
Amor Rock
Rock Mi amor
Mucho amor y mucho rock


(Leo García y/o Pablo Chaijale)

Alguien. Leo García

U

Una canción demanda... minutos
un aviso
una segundos
un pañal
un llanto
un minuto
un hijo
un solo
un script
un llanto
un garabato
un acurruco
un viaje
un entrelágrimas
un escribo
une "me cagué"
un sollozo
un no sé qué hacer
un te espero
un te demando
una que lo hagas
un de una
un no puedo
un yo sé que podés
un relajatedeunavez
un despacio
un llanto que no podés
(con) un RE


 ¿Entonces? Hacelo

Maicena

Me desperté sin tanto ruido. La casa estaba a oscuras. Sonaba el despertador del teléfono celular y tranquilo daba vueltas en la cama como un remolón. La gata entre las sábanas me daba un poco más de calor con los últimos fríos que van quedando de las siete de la mañana. No soñé nada que recuerde. Miro el despertador y no funcionaba. Me despabilé un poco, como sabía que no iba a llegar temprano me puse la misma ropa de ayer, me lavé la sabiola en la pileta del baño de servicio, que son de esas que se usan en los lavaderos antiguos y fui para la cocina a calentar el agua del desayuno. No había luz, estaba tranquilo igual. Y llegué a la cocina.

La llave de agua estaba abierta al mango y la mesada como la bacha hasta el tope de agua chorreaba. Cerré violentamente el grifo. Eran las ocho y cuarenta y cinco, me tenía que ir, había agua por toda la cocina y el garage de la casa. Todo inundado. Suddenly, bajó mi mamá a hacer lo mismo que yo, ver el disyuntor a ver si volvía la luz. Nada, saltaba al toque. Luz, apagón, intermitencias. ¡Agua, Dios, Agua!. Entre los dos tratamos de sacar los charcos que habían abajo de los artefactos eléctricos. Le pregunté si habían cortado el suministro anoche, me dijo que papá había bajado a las tres de la mañana a hacer pis. Mi viejo tiene demencia senil plus una aneurisma hace ya 26 años con ciertas secuelas que cada vez más se hacen notar y es adicto al café como a las palabras cruzadas. Vive en su mundo, hace cosas y se olvida. Me salió el Gasalla de adentro con un viejo de mierda disparado al aire pero la ligó mi mamá con el secador en la mano y saqué la pava del fuego porque ya no me tragaba el desayuno. Mi mochila se mojó y se habían empapado con el diario de ayer, recibos y los libros. El de Kartun, Pinter y Baumann. Mi mochila es como la del Superagente 86´, con cepillo de dientes explosivo llevo ahí. Rajé.

Tomé un taxi en la parada del colectivo. El tipo, un dominguero. Me salió ocho pesos más de lo habitual y encima iba por cualquier parte, es como que la bronca cada vez más me salía como espuma de mar revuelto. Hizo una escalera entre las calles Mexíco, Estados Unidos y Pavón. En la radio de la primera del dial hablaban de la veda electoral con humor. Ayer me había fumado la cacerolita de protesta que me aturdió la cena. Algas de mar por todos lados que te dan cosita en la entrepierna cuando viene una ola. Mala digestión. Todas las avenidas atestadas de coches.

Llegué a la estación de tren por Hornos. Al buscar el diario al puesto, me avisa el señor de tegobis que se lo habían llevado, siendo que estaba acordado que lo iba a buscar. Ya eran las nueve y treinta y cuatro. Me voy a buscar el Página. Leche ¡aaarg...vida! La oficina de Informes llena de papelitos con comprobantes de demora en las ventanillas, parece que todo estaba andando con retrasos. En la estación también. Llegué, improvisé un saludo con mi indisimulada cara de culo. Miriam me preguntó qué me pasaba, digo nada y le avisé del el examen de Excel que cursamos juntos. Ella me preguntó cómo me fue. Me salió el rabia y le dije, "Cheeeee miriam..." Todavía no lo di. Le meé la cabeza.  Ella se rió igual, la saludé y me fuí.

A la mañana hay que cambiarse de pañal mental. Subí a dejarle el diario a mi jefe, bajé e hice la cola como nene con la plata en la mano en la panadería. Súbitamente me hice un café con leche  en el escritorio con dos alfajores de maicena para sacarme la amargura de la mañana. Comerse unas tapitas de maicena unidas por coco rayado mezclado con dulce de leche y... ¡Salud!

martes, 6 de agosto de 2013

Zasturrión

Un chabón tenía toda la pinta de tirarse a las vías. Hasta se arreglaba el pelito. Con Yenny, las ofertas de electrodomésticos, herramientas en el morral, y la birome. Estaba nerviudo. Menos mal que lo cercaron dos. El personaje vióse y se corrió atriqui, se posó sobre una viga a garabatear el sobre fácil como si le estuvieran oliendo el culo mientras llegaba el último vagón al andén. Cuando se abrió la puerta del metro, se impulsó y se sentó. En la misma hilera donde estaba sentado había un periodista reconocido leyendo un libro dedicado. El flaco se quedó en que no sabía como pronunciarle el apellido. (Érase una de cowboys)