lunes, 16 de diciembre de 2013

No lastiman las palabras

nos encontramos
hasta con lo que no
queremos
ver o sí, pero en otra situación.

Un paisaje,
un lecho
lo tarde
que nos
expone
las obras,
que el bien lo haga
otro.

Veo al divorciado
de enfrente
con la hija e igual
me enternece
su
sutilas amenazas
al usar para peinarla
Que dejen de lastimar las palabras
aunque me duela peinarte